Luego de haber recibido múltiples quejas por parte de vecinos residentes de la colonia Manantiales, en el municipio de Nezahualcóyotl, sobre un presunto olor a gas y combustible en la red de agua potable y drenaje, autoridades locales acudieron a realizar los estudios correspondientes para descartar cualquier anomalía.
El Organismo Descentralizado de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Nezahualcóyotl (ODAPAS) informó que realizaron un recorrido a través del cual visitaron los domicilios afectados y se llevaron a cabo pruebas de medición para corroborar la calidad del agua y se descartó cualquier tipo de riesgo.
Según los datos arrojados por sus pruebas, y tras realizar los recorridos, se identificó que el olor se debía a sedimentos acumulados en la tubería, por lo que se realizó un sondeo para retirar dichos sedimentos y restaurar las condiciones óptimas del suministro.
Además del personal de ODAPAS, también participaron elementos de Protección Civil y Bomberos de Nezahualcóyotl en la revisión, para evitar cualquier peligro que pudiera surgir.
Fue hace unos días cuando vecinos de la colonia reportaron un fuerte olor a hidrocarburo, además de pésimas condiciones en el agua que llegaba a sus domicilios para uso doméstico.
Informaron que el agua en ocasiones presentaba restos de suciedad, e incluso no era cristalina, al contrario, era turbia. Por tal motivo, no podía ser utilizada siquiera para lavar trastes o cepillarse los dientes.
Las autoridades locales brindaron recomendaciones a las y los vecinos sobre el mantenimiento adecuado de cisternas y tinacos para preservar la calidad del agua, pues al realizar los recorridos informaron que se encontraron con algunas cisternas o tinacos que no habían sido debidamente limpiados durante más de una década.
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